En cuestion de Patricio, hay cosas en las que habra cabida a la negociacion, al dialogo ... al " a ver que se le ocurre al werco monda'o para convencerme de hacer lo que el quiere" ...
Y hay otras en las que no habra discusion, negociacion o berrinche que valga, hay cosas en las que simplemente se hara lo que yo diga "porque lo digo yo"
Hace meses que hemos comenzado con este proceso:
* Yo: enseñarle cuando si y cuando no habra negociacion
* El : practicar pushing off the limits y hacerme saber que le vale madres lo que yo opine.
Seguimos aprendiendo uno del otro, creceremos juntos, el se convertira en un hombre sano, limpio y autosuficiente y yo me convertire en una viejita muy sabia.
Y todo nos lo deberemos uno al otro.
Por lo tanto, esto NO es una dictadura...
Es una dictablanda...
Au Revoir Firmado atentamente por:
La Mama de Patito
Y hay otras en las que no habra discusion, negociacion o berrinche que valga, hay cosas en las que simplemente se hara lo que yo diga "porque lo digo yo"
Hace meses que hemos comenzado con este proceso:
* Yo: enseñarle cuando si y cuando no habra negociacion
* El : practicar pushing off the limits y hacerme saber que le vale madres lo que yo opine.
Seguimos aprendiendo uno del otro, creceremos juntos, el se convertira en un hombre sano, limpio y autosuficiente y yo me convertire en una viejita muy sabia.
Y todo nos lo deberemos uno al otro.
Por lo tanto, esto NO es una dictadura...
Es una dictablanda...
Au Revoir Firmado atentamente por:
La Mama de Patito
1 comentarios:
Sin duda alguna, al tener chiquitines nos encontramos, no con solo con un reto increíble, pero también con los mejores negociadores, chantajistas, teatreros, llorones y caras tristes del planeta. Todo de 10. Impecables con sus cualidades de yo quiero y pataleo para conseguirlo.
Lo complicado es que para esto no hay instructivo. Entonces, ¿Cómo manejar la situación y no terminar siendo Papa dictador? Ni idea. Pero para terminar rápido, así: ¿Por qué? Por qué soy tu mami and I know better chiquilin. Just like that. Y después un besito para evitar los “hard feelings”.
Es el juego entre papas & chiquitines: Difícil, entretenido, agobiante, frustrante y desventajoso; más si corremos con suerte y se sigue la instrucción de la abuelita, muy gratificante, sin olvidarse de los chorros de felicidad y tranquilidad por haber criado –dentro de lo que cabe- un buen niño.
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